Ventanas y la eficiencia energética

Las ventanas de aluminio o PVC en Gijón juegan un papel crucial en la eficiencia energética de los edificios. Su diseño, material y construcción influyen significativamente en la cantidad de energía necesaria para mantener un ambiente interior cómodo. Las ventanas de alta eficiencia energética pueden reducir las pérdidas de calor en invierno y el aumento de temperatura en verano, contribuyendo a una menor demanda de calefacción y refrigeración.

En primer lugar, el tipo de vidrio utilizado en las ventanas es fundamental. Los vidrios de doble o triple acristalamiento, por ejemplo, están compuestos por dos o tres capas de vidrio separadas por una capa de gas inerte. Este diseño mejora el aislamiento térmico al reducir la transferencia de calor entre el interior y el exterior. Además, el vidrio bajo emisivo, que tiene una capa especial que refleja el calor, puede contribuir a mantener el calor en el interior durante el invierno y a bloquear el calor del sol durante el verano.

El marco de la ventana también impacta en la eficiencia energética. Los marcos fabricados con materiales como el PVC, el aluminio con ruptura de puente térmico o la madera bien tratada, ofrecen un mejor aislamiento en comparación con los marcos metálicos tradicionales. Estos materiales ayudan a reducir la transferencia de calor y a minimizar las filtraciones de aire.

Otra consideración importante es la instalación adecuada de las ventanas. Una instalación incorrecta puede provocar fugas de aire, lo que reduce la eficacia de la ventana y aumenta los costos energéticos. Es esencial que las ventanas se instalen de manera que se eliminen las brechas y se asegure un sellado adecuado para maximizar su rendimiento energético. Para evitar esto, cuenta con profesionales como los de Porceyo Aluminios.

Las ventanas de aluminio o PVC en Gijón también pueden estar equipadas con persianas o cortinas que ayuden a regular la cantidad de luz solar que entra en el edificio. Estas adiciones permiten ajustar la cantidad de calor que entra y sale, optimizando así el consumo de energía.