Uno de los aspectos más importantes de la fabricación e instalación de ventanas de aluminio en Gijón es el sistema de apertura y cierre de la carpintería, pues de este dependerá que cumpla sus funciones correctamente.
Antes de decidir el sistema de apertura y cierre que queremos para nuestras ventanas, es recomendable estudiar las características de nuestra vivienda, el clima de la zona y conocer nuestras necesidades, además de saber exactamente qué tipos de sistemas existen en la fabricación de ventanas de aluminio en Gijón. ¿No los conoces? Te los explicamos a continuación.
- Ventanas correderas. El marco de la ventana está formado por un carril que sirve de guía para el desplazamiento de las hojas. Su gran ventaja es el ahorro de espacio que supone su instalación, pues esta carpintería ocupa el mismo espacio tanto abierta como cerrada. Uno de los inconvenientes que presenta es que su cierre no es completamente hermético, por lo que el sistema presenta un grado de aislamiento térmico y acústico medio, respecto a otros tipos de cierres.
- Ventanas practicables. Este tipo de ventanas sí presentan un cierre completamente hermético, además, su mantenimiento es bastante sencillo, ya que pueden abrirse por completo.
- Ventanas basculantes. Este tipo de carpintería cuenta con un eje central en torno al cual gira la hoja. Esta clase de ventana no se abre por completo, pero es muy adecuada para superficies curvas o inclinadas.
- Ventanas oscilantes. Las oscilantes son las ventanas perfectas para espacios reducidos que no necesitamos ventilar por completo, como aseos y garajes. Al igual que las anteriores, tampoco se abren por completo.
- Ventana fija. Aunque no puede abrirse, este tipo de ventana aporta luminosidad y un óptimo grado de aislamiento, por lo que es ideal para lugares que no necesitan ventilación natural.
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